Llegando al aeropuerto de Loiu, el astro rey ilumina, por poco tiempo, el camino de los aviones que se disponen a aterrizar.
Impresionante la estampa de ver anteriormete al sol entre los picos del Anboto.
A pesar de ser tximbolandia era digna de observar esa puesta de sol!!!
¡Ay, qué poco te queda! Ya verás cómo al final lo echas de menos, y el año que viene te reenganchas... Podría ser, no sé, un perro por día, sacando fotos de perros distintos, o... ¡¡mejor, mejorr!!... ¡Un tío bueno por día! ¡Voto por éste! Ejem, pongamos que no he dicho nada, ¿vale? ;)
ResponderEliminarYa en serio, tiene mucho mérito, que no es fácil ni acordarse todos los días ni encontrar algo que fotografiar, que al final tiene que parecer que ya no queda nada a lo que no hayas sacado una foto. ¡Animo, Aritz!